El COVID-19 es una enfermedad relativamente nueva, aún se realizan estudios para entender su mecanismo. Así como también análisis para tener clara su composición genética. Por lo tanto cada día se descubren cosas nuevas y hasta el momento nada es 100% cierto.

La mayor preocupación de las personas es claramente el contagio. El gobierno ha dispuesto una serie de medidas para evitar el contagio, entre ellas: el distanciamiento social, cuarentena, uso de mascarillas, contante lavado de manos, desinfección de superficies, etc.

Grupos vulnerables

Basándonos en la información recopilada hasta el día de hoy, las personas que necesitan tener mayores precauciones son:

Tercera edad, mayores de 65 años, esto incluye a toda la población de adultos mayores. Sobretodo aquellos que viven en las condiciones socio económicas mas bajas, los que sufren de enfermedades pulmonares y cardíacas, inmuno suprimidos, dependientes de medicamentos, a los que viven en casas de reposo junto a demás personas de su edad.

Enfermedades crónicas, de cualquier edad ya que algunas de estas condiciones se manifiestan desde edades muy cortas como el asma, afecciones cardíacas.

• Asma
• Enfermedad pulmonar crónica

Personas inmunodeprimidas, personas que tengan un sistema inmunitario débil. Por diferentes razones como: haber recibido un trasplante de órganos, fumadores, diabéticos, pacientes de VIH/SIDA.

Pacientes con enfermedad renal, que necesiten tratamientos de diálisis de manera continua. Se exponen al acudir al hospital y entrar en contacto con demás personas, así como también por encontrarse medicados y con un sistema inmune comprometido.

Obesidad grave, tener un IMC alto indica un riesgo debido a que se pueden presentar dificultades para respirar. El síndrome de distrés respiratorio agudo (SDRA), además puede significar una dificultad para los médicos brindar el apoyo respiratorio.

Afecciones cardíacas, incluímos las cardiomiopatías, enfermedades cardíacas congénitas, insuficiencia cardíaca entre otros. Es recomendable tener control de los medicamentos que se administra, manejar la presión arterial constantemente, seguir rigurosamente las indicaciones del medico de cabecera, tener suministro de medicinas.