Por: Miguel Villaverde Cisneros
09/07/20
En el colegio no me gustaba mucho la biología, pero recuerdo que mi maestra se mataba explicando esto: “Cuando respiramos, el aire lleva oxígeno de la atmósfera a nuestros pulmones, y en los pulmones entra el oxígeno a la sangre y sale el dióxido de carbono, el famoso intercambio de gases.” Según el Dr. Elmer Huerta, el oxígeno es vital para el ser humano y existe un mecanismo cerebral que controla el nivel de oxígeno, de lo que se llama saturación. Va entre el 95 y 96 por cierto, debajo de este nivel se denomina hipoxia.
Pues bien, por simple lógica al respirar, se exhala dióxido de carbono (CO2), el cual a través del uso excesivo de las mascarillas vuelve a ser inhalado provocando esa falta de oxígeno en sangre, mareos, malestar y mucho cansancio. Son estos últimos síntomas primarios del coronavirus.
La hipoxia, es precisamente eso, un término para describir la falta de oxígeno en la sangre. A mi criterio, causado por el uso inadecuado de la mascarilla, lo cual puede traer consecuencias fatales para nosotros. Hay mucha información al respecto sobre la veracidad o falsedad de esto en internet. Digo esto, porque a lo largo de este tiempo, no hice un uso adecuado de la mascarilla por mi propia salud, sufro de asma y me ahogo al usarla por más de 5 minutos. No salí a correr con la mascarilla puesta, ni para trabajar, ni la utilizaba al visitar algunos amigos en los hospitales.
Recorrí cerros en asistencia solidaria a comedores y ollas comunes, incluso a hogares con pacientes covid. ¿Por qué no me infecté? ¿Soy inmune? No lo creo. Una doctora joven me dijo que era asintomático ¿Es esto cierto? ¿Te puede dar una enfermedad sin síntomas? Creo haber aprendido bien de mi profesora, todos tenemos sistema inmunológico, el cual nos avisa de tal o cual enfermedad.
Quizá muchos de ustedes saben lo frágil de mi salud, a los 6 años una bronconeumonía puso en riesgo mi vida, y sin falta cada año un resfrío en el invierno termina por instalarme al menos 15 días en cama. Mi asma severa me impide utilizar la mascarilla de manera permanente, si la utilizara, simplemente me habría muerto y se habría dicho que es por el virus.
Existen normativas que te obligan, sin razón científica alguna, a utilizar la mascarilla para hacer tus actividades y hasta para correr en el parque. Pero existe un derecho natural que nos asiste a todos los humanos. Nadie puede condenarte a respirar tu propio veneno, tampoco quitarte el derecho a respirar aire puro, a pesar que no sea tan puro.
Fuentes:
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